En el masaje con piedras se pueden utilizar tanto piedras frías como calientes. El masaje con piedras es una terapia oriental que trabaja el plano físico y el mental.
Este objeto ayuda a relajar la musculatura y reducir las tensiones musculares, para eliminar el dolor, también ayuda a conseguir un equilibrio energético pudiendo ayudar a recuperar el sueño. Además revitalizan, iluminan y oxigenan la piel.
Para la realización de este masaje se utilizan piedras lisas. Estas piedras pueden ser de origen volcánico (piedras calientes) o de mármol (piedras frías). Este material se desliza sobre la piel con la ayuda de aceite para masajes.
La temperatura de las piedras promueve la mejora de la circulación sanguínea, la eliminación de toxinas y la relajación de articulaciones y músculos rígidos o doloridos. También se puede combinar el uso de estas piedras calientes con el de piedras frías. La alternancia de temperaturas sirve para estimular aún más el riego sanguíneo.
Este masaje se puede compaginar, si se desea, con otras técnicas de masaje para aprovechar la situación de relajación de los músculos.
El masaje con piedras calientes está indicado para todo el mundo. Sirve de gran ayuda a las personas que necesitan curar algunas dolencias, como por ejemplo sobrecargas o contracturas, a medida que estas piedras avanzan sobre el cuerpo notamos un alivio instantáneo y una sensación de relajación total.
Además de lo mencionado anteriormente, las piedras calientes y frías ayudan a combatir la fatiga mental y física, también ayudan a disminuir las contracciones e inflamaciones musculares, a activar la circulación sanguínea y además ayudan a drenar el ácido láctico y el carbónico.
Indagando en la parte mental, las piedras calientes nos proporcionan un calor muy placentero que induce a la relajación profunda, para poder dormir de tal forma.
Por todo lo nombrado anteriormente, este masaje es el indicado para personas con insomnio, estrés, ansiedad, nerviosismo y para las personas con dolores de espalda, dolores musculares, mala circulación, artrosis, artritis, etc.